De noche huele a citronela



Una planta de citronela para espantar los zancudos y atraer muertos.

Que el olor le guste a ella, asesinada, y se lleve mi sueño engreído.

Que venga y me recuerde que está muerta. Que esta vez le tocó a ella, a mí, a nosotros. Que venga y se lleve mi ceguera, mi santurronería, que se lleve mi fe. Que me quite el sueño como tantas cosas que ya no tengo. 

Mi gracia consistía en poner la cabeza en la almohada y dormir "como una niña". Me gustaba esa inmadurez. Ya no la tengo, ya no la necesito.


En la noche me llamo Teté. En la noche le lloro como adulto.

Una planta de citronela para atraerla a ella. Para envolverme a mí.

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