Para Gabriel de la Peña
Me da mucho gusto que estés bien y que hayas regresado a casa.
Te recuerdo como un muchacho dulce y trabajador. ¿Qué te habrán hecho? ¿Qué te hacen ahora?
Lamento que tengas que ver la humillación en las redes sociales y el estigma, lamento que seas carnada de un gobierno al que le importa su imagen y seguir fingiendo que no tenemos un problema de seguridad y corrupción en Jalisco. Lamento que haya un meme que te recuerde lo que -quién sabe- hayas pasado en el Estado de México.
Lamento que tu verdad no pueda ser divulgada.
Tu vida es más importante.
Esto va a pasar, la memoria de las masas es a corto plazo. Pronto serás un "te acuerdas de...", una estadística, un caso cerrado.
No lamento haber compartido tu foto, ni haber sentido angustia por tí y tu familia, no quiero mis lágrimas de regreso. Estás vivo, eso es lo importante.
Sé que la gente a tu alrededor, la que te quiere, sabe la verdad, tú la sabes (seguro tienes marcas para probarlo)... y ahora yo la sé.
Ojalá algún día puedas contar tu historia para hacernos reflexionar y enfrentarnos con nuestros juicios.
Qué bueno que volviste a casa.
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